Les dejo el video de nuestro viaje completo. La verdad fue una gran aventura que le recomendaría a todos que tengan una moto hacer por lo menos una vez en la vida.
Detalles de nuestro viaje en moto por Estados Unidos
Este viaje nació después de la segunda botella de Bacardi en el Big Silver de Palmas y Monte Tambor (Ya no existe). Tanto Mich como Tavo y el servidor nos habíamos quedado con ganas de más después de nuestro viaje en moto a Guatemala y Belize; un viaje al norte era la decisión lógica.
En el curso de los próximos meses trazamos diferentes rutas considerando distancias y los días que teníamos. Rutas que nos llevaban únicamente por los parques nacionales de Arizona. Rutas que nos llevaban únicamente por California. Incluso rutas que nos llevaban por Nuevo Orleans rumbo a Florida.
La ruta por la que nos decidimos fue esta;
Día 1 y 2; saliendo de México
La decisión más difícil y con la que batallamos días fue la de como salir de México lo más rápido posible. Habría tiempo suficiente después para explorar el norte del país pero este viaje iba a ser por Estados Unidos. Para llegar a la frontera hay de dos sopas; por el noreste del país vía Monterrey y Laredo o por el noroeste vía Mazatlan, Hermosillo y Nogales. Nos hizo mas sentido la segunda ya que finalmente íbamos rumbo a Phoenix. Esto sin embargo implica tres días maratonicos de 1000km, 900 y casi 600 kilómetros. Pensamos incluso meter nuestra solicitud para obtener el certificado de “trasero de hierro” el SaddleSore 1000 and Bun Burner 1500.
Las carreteras de México a Nogales están en perfecto estado aunque en general son trayectos de horas sin una sola curva. Pasando Mazatlan empiezas a ver cada par de horas un trailer volcado resultado de choferes que se quedan dormidos en los interminables trazos.
Cruzar la frontera por Nogales
Poco antes de cruzar la frontera, del lado mexicano hay un mega reten. Como suele suceder, nos toco uno de esos militares que mas por curiosidad que cualquier otra cosa quiere que abras las alforjas para ver como y que podrían traer dos personas abordo de una moto. Para este entonces llevabamos más de dos días de cambios de ropa húmedos con sudor en una de las alforjas. Se lo advertimos al oficial que si habría ese saco podría vomitar. Sin mucha atención a nuestra advertencia lo abrió y si, casi vomita. Nos dio la indicación de volver a cerrar todo y nos deseo suerte en nuestro viaje.
La frontera bastante sencilla. Yo tenía el pendiente de, al pasar como ciudadano estadounidense me iban a pedir un carnet de conducir de ese país. Por suerte no fue el caso y el “immigration officer” me pregunto a donde íbamos, si viajabamos juntos (yo y la moto de atrás donde por ese momento iba Mich y Tavo). A Mich y a Tavo, ambos nacionales, los dejo pasar pero les recomendó se estacionaran y regresaran caminando a las oficinas de migración a llenar un par de papeles que nos podrían pedir más adelante. Al hacer este tramite a Mich y Tavo les toco una de esos agentes aduanales super mamonas por no decir racistas que los trato como las chanclas. El documento que tenían que sacar nos permitía o avisaba que íbamos a estar en el interior de Estados Unidos (mas allá de los 100km de la frontera).
Estados Unidos: Primeras impresiones
Fuera de un par de días aquí y allá, no había estado en USA desde la universidad y mucho menos había manejado en ese país en más de 10 años. Por mucho que se quejen los gringos, sus freeways y highways son como tapetes perfectamente bordados sin un desperfecto. Freeways de 6 carriles de cada lado, todos los conductores tan respetuosos de esas señales que dicen “stop”.
Gasolineras con tienditas que parecen wal-mart. Wal-marts que parecen tener el triple de productos. Perfectamente consciente de las limitantes de vivir como gringo en un país tan libre como Estado Unidos. Pero tiene sus cosas padres y se disfruta todo ese capitalismo, exceso y “perfección”.
Los campamentos son lo mejor. Nos impresiono que llegas a tu “campsite” y te espera adjunto a un tronco una nota de bienvenida con tu nombre y el número de noches de tu estancia. Y un balance casi perfecto entre la aventura de la natura (sentirte que estas en el bosque lejos de todo) y el confort de tener un super perfectamente equipado a pocos kilómetros.
Los gringos en sí en todo el viaje de Arizona a Los Angeles, super amables, atentos y respetuosos como es característico de la gran mayoría de su población.
Ciudades y Campings
Les recomiendo muy de corazón esta ruta que hicimos. Creo que fue una combinación casi perfecta entre dormir bajo las estrellas y hoteles de ultra confort.
Después de visitar la monumental y fuera de este mundo Biosfera II dormimos en uno de esos Ramada Inn´s en la ciudad de Phoenix. De ahí partimos rumbo al Gran Cañon para dormir bajo las estrellas y el pintoresco valle que desciende al infinito.
El parque nacional de Gran Cañon da para pasar una semana entera, sobre todo si te gusta caminar. Apenas tuvimos oportunidad de bajar un par de kilómetros a la profundidad del cañon y absorber las vistas panorámicas. Cenamos y desayunamos delicioso, empacamos y partimos a sin city no sin antes pasar al famoso Hoover Dam.
Nuestra experiencia en las vegas se resume de la mejor manera en el video que ven arriba… brinquen al minuto 6:20. Llegando a Las Vegas te da la impresión de que la calle es demasiado pequeña y que no sabes porque decidiste dedicarle 2 días a estar rodeado de hoteles. Una vez que empiezas a caminar y explorar te das cuenta que hay miles de cosas que hacer en ese Strip de apenas 6.7km y todo parece ser un bombardeo a los sentidos.
Salimos de ahí con una pequeña nube en la cabeza y alcohol todavía en la sangre. Fue un viaje muuuy largo rumbo a nuestro siguiente campamento en medio del valle de Yosemite. Esa carretera es típica de Estados Unidos con trayectos larguísimos sin curvas con nada más de áridos campos en ambos lados de la carretera interrumpido de ves en cuando por una gasolinera y Rest Station de ultra lujo. Nos acompañaban unas intensas rafagas de viento a tal grado que íbamos con a 70mph con las motos inclinadas casi a 45° intentando mantener la línea dentro de nuestro carril.
Yosemite
Llegamos a Yosemite de noche via la entrada por Bishop, June Lake y Mono Lake. Creo que es la entrada más apartada del centro del parque nacional. Y ya era de noche. Dentro del parque tienen un limite de velocidad muy estricto de entre 15 y 35mph. Tiene sentido, si vez muchos venados, sin embargo si que sientes que vas en cámara lenta. Tardas años y años en que pasen los kilómetros y te acerques a tu camping.
De pura suerte llegamos derechito a nuestro camping y siguiendo esta buena fortuna encontramos nuestro lugar en plena oscuridad. Nos impresiono que tanto el parque como los demás vacacionistas hayan respetado nuestra reservación. Ya todos los demás campistas estaban dormidos y erigimos campamento en silencio y con un poco de miedo de los osos.
Era una noche clara y fría debajo de esos enormes sequoias. Aún así y un poco acalurados de tanto desempacar a Mich y el servidor se nos hizo buena idea dormir sin lona exterior en nuestra casa de campaña para poder tener una buena vista a las estrellas. Estábamos tan cansados que nos quedamos dormidos a los pocos minutos. 60 minutos después nos encontrabamos estábamos bien despiertos muertos de frío. El problema era ese temor a los osos. Quién se iba a atrever a salir allá afuera a por la lona y colocarla encima de nuestra casa. ¿¡quien!?
Al final en un punto de la noche me arme de valor y coloque nuestro techo. La mañana siguiente desayunamos y empacamos pues a tres meses de nuestro viaje solo había encontrado una noche de camping en todo el parque. Ibamos a probar nuestra suerte con los campamentos “first come first serve” (los que no necesitas reservar) para las próximas noches.
Tip importante; en el momento que se te ocurra ir a acampar a un parque nacional estadounidense en ese momento, sea la mitad de la noche o a la mitad de una comida con amigos, metete a internet y reserva. Si algo tienen los gringos es que son bien pinche organizados.
A pesar de que en ese momento California seguía a la mitad de una sequía histórica y que a causa de ello la mitad del parque había estallado en llamas meses atrás, el lugar lucía espectacular. Los senderos, las cascadas, el olor a pino, las fogatas, comidas y desayunos y porque no, la tiendita oficial, el super y la tienda de “sporting goods”.
Si tienen la oportunidad, dense la oportunidad de visitar este maravilloso lugar. Reserven con antelación y pasen el mayor número de días posibles.
San Francisco y Big Sur
Mi prima nos acogió en su ordenado hogar en Walnut Creek a las afueras de la ciudad de San Francisco. Me dio mucho gusto verla fuera de México y en su día a día.
San Francisco es una ciudad de visitar. Muy fuera de lo común para una ciudad estadounidense y toda la opulencia hipster del Tech, Silicon Valley, etc. Te recomiendo rentar una de esas bicis que tantas compañías te rentan y darle la gran vuelta a la ciudad cruzando el famoso Golden Gate.
Llegabamos a una de las partes más anticipadas del viaje; La famosa Pacific Coast Highway. Si todo salía bien, (y al final salió bien) íbamos a rodar uno de los tramos más bellos de esta carretera justo mientras el sol acariciaba el horizonte. Donde todos los colores del cielo se tornan rosados, morados y azules intensos y las sombras se alargan. Es una cosa hermosa esta carretera y un gran tributo a una sociedad donde el automóvil es rey.
Antes de ello sin embargo hicimos una parada en Monterrey Bay para visitar el acuario. No dejen de visitar este lugar… aunque les duela el codo. A nosotros nos dolió doblemente porque llegamos 45 minutos antes de que cerraran. Era pagar la entrada completa y echar un vistazo o perdérnoslo para siempre. Es impresionante como esta montado este acuario. No tienen ningún pes gigante como ballenas o delfines, pero todos los habitats y el recorrido es perfecto.
De nuevo llegamos de noche a nuestro camping en Limekin State Park. De nuevo, todo el camping se encontraba completamente lleno excepto por nuestro lote que nos había estado esperando pacientemente todo el día hasta que llegáramos.
Después del acuario pasamos a un supermercado a comprar Clam Chowder para nuestra cena. Cabe mencionar; ese día era mi cumpleaños! Cenamos delicioso. Absolutamente inolvidable ese clam chowder en pan sourdough todo a la luz de nuestras linternas y la luna.
Al día siguiente seguimos bajando rumbo a Los Angeles haciendo una parada para visitar Hearst Castle.
Reseña de Hearst Castle
Es un lugar muy interesante y impresiona la opulencia sin embargo de todos los lugares que visitamos me dejo con un sentimiento que pague demasiado por lo que fue.
El problema es que dividen la visita al castillo en cuatro tours diferentes que exploran diferentes partes del castillo – las habitaciones principales, las habitaciones del segundo piso, la cocina, etc. Cada uno de estos tours cuesta $25 dólares y dura como 45minutos incluyendo lo que tardas en subir y bajar al castillo en el bus.
Entonces después de media hora que termina el tour te quedas con una cara de JUAT! eso fue todo? Apenas fueron como 5 habitaciones todas muy similares en que parece que fue a Galerías el Triunfo a llenarlas de cosas.
Creo que deberían armar un paquete que costara un poco mas caro pero que explorara mas de la casa. Incluso si fuese psicologico, pero duele el codo pagar dos tours para ver las habitaciones o la cocina o lo que sea.
Si van subiendo o bajando por la PCH es una buena parada, si van en plan ahorro, mejor visitar el acuario de Monterrey u otro lugar.
Los Angeles
Llegamos por fin a la ciudad de mi adolescencia. La gran metropolis de Los Angeles. Después de considerarlo nos habíamos decidido por quedar en un hotel. Teníamos pocos días y íbamos en plan turistas. Ya habría tiempo para regresar y visitar con amigos en otra ocasión.
Hicimos todo el recorrido turistico con paradas en Venice Beach, Sunset Boulevard, Hollywood, Santa Monica, Rodeo Drive, Hollywood Studios, Disney. Es una gran ciudad la ciudad de Los Angeles.
Reseña de Hollywood Studios vs Disneyland
Siento que Hollywood Studios debería costar justo la mitad de lo que te cobra Disney.
Se que no son iguales pero por 99 dólares Disney te da un espectáculo que no te lo comes ni con 16 horas y que incluye un par de desfiles, juegos pirotécnicos, (fantasmic si vas en épocas del año) etcetera a si, y ademas un Fast Pass gratuito.
Cuando fuimos a Universal no había mucha gente y para las 3 de la tarde ya lo habíamos recorrido todo. Pagamos, un poco innecesariamente, el “Fast Pass” para un total de $169 dólares por cabeza… y la verdad me pareció muy caro para lo que fue.
9 de cada 10 atracciones utilizan el “Cinema 4D” como método de llevar el recorrido – es decir, una silla que se mueve y una película. En cosas como Transformers esta bien lograda con una historia que vale la pena pero Los Simpsons por ejemplo la historia no tiene un hilo conductor y nada mas te mueven a lo bruto.
Otras atracciones mas antiguas como Jurassic Park o el “world-famous Studio Tour” ya se ven bastante fechados y bastante muy descuidados.
El parque es pequeño y la verdad es que no hay tanto que hacer.
Supongo es una visita obligada pero si tienes que elegir entre esto o Disney, si pensarlo vete por Disney.
Fin de nuestra aventura, comienzo de una nueva…
En Los Angeles concluyo nuestra aventura como el trio de viajeros que empezo el viaje. Ya estaba planeado. Tavo tenía que estar en Nueva York para una serie de juntas de trabajo. Mich tenía que presentarse en la chamba ese lunes y tomaba un avión derechito a la Ciudad de México. Yo regrese al estacionamiento de LAX y un poco triste por haber perdido a mis compañeros de viaje; decidí ir de compras.
Pueden continuar la aventura de este viaje; un recorrido solo por Baja California aquí;